martes, 20 de octubre de 2009

LA PRENSA DIARIA SE MUERE


Le Monde Diplomatique
Por Ignacio Ramonet

El siniestro es descomunal. Decenas de diarios están en quiebra. En Estados Unidos ya han cerrado no menos de ciento veinte. Y el tsunami golpea ahora a Europa. Ni siquiera se salvan los otroS "rotativos de referencia": El País en España, Le Monde en Francia, The Times y The Independent en el Reino Unido, Corriere della Sera y La Repubblica en Italia, etc. Todos ellos acumulan fuertes pérdidas económicas, derrumbe de la difusión y hundimiento de la publicidad. Para recortar gastos, muchas publicaciones están reduciendo su número de páginas; Los despidos son masivos. Desde enero de 2008 se han suprimido 21.000 empleos en los periódicos estadounidenses. En España, "entre junio de 2008 y abril de 2009, 2.221 periodistas han perdido su puesto de trabajo".

La prensa escrita diaria de pago se halla al borde del precipicio y busca desesperadamente fórmulas para sobrevivir.
Algunos analistas estiman obsoleto ese modo de información. Michael Wolf, de Newser , vaticina que el 80% de los rotativos norteamericanos desaparecerán (3). Más pesimista, Rupert Murdoch pronostica que, en el próximo decenio, todos los diarios dejarán de existir...

¿Qué es lo que agrava tan letalmente la vieja delicuescencia de la prensa escrita cotidiana? Un factor coyuntural: la crisis económica global que provoca una mengua de la publicidad y una restricción del crédito. Y que, en el momento más inoportuno, ha venido a acrecentar los males estructurales del sector: mercantilización de la información, adicción a la publicidad, pérdida de credibilidad, bajón de suscriptores, competencia de la prensa gratuita, envejecimiento de los lectores...

La prensa diaria sigue practicando un modelo económico e industrial que no funciona. El recurso de construir grandes grupos multimedia internacionales, como se hizo en los años 1980 y 1990, ya no sirve frente a la proliferación de los nuevos modos de difusión de la información y del ocio, vía Internet o los teléfonos móviles. Paradójicamente, nunca han tenido los diarios tanta audiencia como hoy. Con Internet, el número de lectores ha crecido de manera exponencial. Pero la articulación con la Red sigue siendo desdichada. Porque establece una injusticia al obligar al lector de kiosco, el que compra el diario, a subvencionar al lector de pantalla que lee gratuitamente la edición digital (más extensa y amena). Y porque la publicidad en la versión de la web no cunde, al ser mucho más barata que en la versión de papel. Pérdidas y ganancias no se equilibran.
a todo lo anterior se suma lo más preocupante: el desplome de la credibilidad.

Frente a los nuevos "pecados capitales" del periodismo, los ciudadanos se sienten vulnerados en sus derechos. Saben que disponer de información fiable y de calidad es más importante que nunca. Para ellos y para la democracia. Y se preguntan: ¿dónde buscar la verdad?

1 comentario:

  1. Que la prensa escrita este en serio peligro creo que es algo que la lógica nos lleva a pensar. La continua proliferación de los medios informáticos (internet), relega la lectura tradicional de noticias; ahora lo más rápido, barato y cómodo es leer la prensa mediante nuestro ordenador o movil, el cambio de plataforma es evidente y mas atractiva. Entramos en la etapa de lo virtual.
    Sin embargo a estos factores debemos añadir los efectos de la crisis como influencia capital en el desmoronamiento de los grandes periódicos de todo el mundo; la falta de créditos y publicidad hace mella también en esta preocupante cuestión.
    La diversidad de periodicos es notable,la tendencia ideológica es algo sabido, pero se pone en duda su pluralidad y veracidad, haciendo que el usuario se encuentra en una situación de preocupación y poniendo en duda la credibilidad de la prensa escrita.

    ResponderEliminar